Cuando una pareja se somete a un tratamiento para tratar su infertilidad, se puede esperar la corrección o control de las enfermedades que la causan para finalmente lograr el embarazo.
Las recomendaciones de la OMS, que clasifica a la infertilidad como una enfermedad que debe ser evaluada desde una perspectiva globalizadora biológica, psicológica y social.
Existen técnicas tanto de baja hasta alta complejidad para ayudar a las parejas a lograr el embrazo.
El primer paso es tener un diagnóstico certero de lo que está causando la infertilidad tanto en la mujer como en el hombre. Estos padecimientos deben ser tratados médicamente antes de intentar técnicas de reproducción asistida.
Las técnicas de reproducción asistida, van desde los tratamientos más habituales y menos complejos, como la inseminación artificial, la cual consiste en lograr que la mujer ovule, mediante una estimulación ovárica controlada o inductores de la ovulación como es el citrato de clomifeno y dando seguimiento con la ecografía vía vaginal al número y tamaño de los folículos que se desarrollan en un ciclo menstrual. Una vez que se consigue la ovulación, se deposita la muestra de semen dentro de la cavidad uterina en el momento más adecuado y en las mejores condiciones posibles. Este procedimiento se puede intentar máximo hasta 6 veces, lo cual se traduce una vez por ciclo menstrual (6 meses, máximo).
También existen las técnicas de reproducción asistida más avanzadas como la fecundación in vitro. Habitualmente se estimula la ovulación durante 8 ó 10 días, se extraen los óvulos, y a partir de ese momento, en función de la calidad de la muestra de semen, se hacen técnicas de fecundación in vitro convencionales, que consisten en poner óvulos y espermatozoides en contacto, o bien técnicas más avanzadas en las cuales, por cada óvulo, tenemos que coger un espermatozoide bueno e inyectarlo dentro del ovocito. Esas técnicas se denominan micro inyección espermática.
Existen también las posibilidades de donación de gametos (donación de óvulos y/o espermatozoides), cuando se han agostados todas las posibilidades de lograr el embarazo con células propias o existen factores específicos que impedirán lograrlo.